Empezaba a aceptar que ya no estabas. Que tú tenías tu vida, y yo la mía. Muy diferentes aunque paralelas al mismo tiempo. Siempre creí que nuestros caminos no volverían a juntarse, como esas líneas trazadas en un papel, líneas que se ven, pero no se pueden tocar. Líneas cuyo destino no es ser una. Empecé a superarlo, de veras.
Pero hoy me has sonreído.. y lo has estropeado todo.
Pero hoy me has sonreído.. y lo has estropeado todo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario